Estrategias para soportar estar sin tu pareja o con ella demasiado tiempo
El Estado de Alarma por el Covid-19 o llamado de otro modo, Coronavirus; desde Marzo de 2020 en España está haciendo estragos en nuestra sociedad a todos los niveles: en nuestra sanidad, en la economía del país…Pero no hay que olvidar, que el confinamiento también tiene repercusiones en nuestra salud mental.
Sin salud mental todo se desmorona, un trabajo, una familia, una pareja…. y de ello vamos a hablar en este artículo. Centrándonos especialmente en las repercusiones del confinamiento para las parejas.
Pueden haberte sucedido dos escenarios: o bien te has quedado confinado/a sin tu pareja. O bien, como ya convivíais juntos os habéis quedado los dos en casa. Y si ya añadimos a parejas que tienen hijos, se complica algo más el asunto, porque entran otros factores en juego.
El confinamiento probablemente va a intensificar problemas anteriores que la pareja ya sufría; la falta de libertad de movimientos, aunque sea por causa externa (porque el Gobiernos lo impone), puede crear disputas por diversos temas y situaciones emocionales intensificadas.
Confinamiento sin tu pareja
Para las parejas que llevan poco tiempo y que se encuentran en fase de enamoramiento, el confinamiento también puede resultar difícil. Sobre todo porque, en esta fase, la principal necesidad es estar juntos, hacer actividades, vivir experiencias y disfrutar del otro.
En la fase de enamoramiento, la pareja no está estable. En el sentido, que el enamoramiento es una explosión de emociones de amor obsesivo más o menos rápida e intensa según la persona. El confinamiento corta por completo la posibilidad de pasar tiempo con el otro y no se satisfacen las necesidades de esta fase. Por lo que pueden empezar a surgir disputas: «¿porque no te conectaste? ¿Porqué apenas me llamas?».
En esta fase, la falta de afianzamiento en la pareja, la falta de citas presenciales, malentendidos por las redes…. todos estos aspectos os distanciarán porque la distancia física puede provocar distancia emocional. Si demasiados conflictos aparecen, van a impedir que la pareja siga unida. Cabe destacar que la pareja enamorada, por muy fuerte que sea el enamoramiento, no implica que haya un compromiso establecido.
Para que esto no ocurra, hay recomendaciones que os pueden ayudar:
- Hacer videollamadas regularmente o llamadas de teléfono. Sólo hablar por Whatsapp no es muy bueno, faltan elementos esenciales como el tono de voz o la expresión facial, con lo que, es muy facil caer en malentendido por malinterpretar la reacción del otro.
- El factor sorpresa: hazle algún detalle a tu pareja a través de las redes (sorpréndela con un vídeo, con una foto, con un email amoroso…).
- Cuando se desea disponer de tiempo para uno mismo, avisar a tu pareja de que te vas a tirar horas haciendo una actividad que requiere toda tu atención. Así evitamos malentendidos y malestar en la otra persona, que podría malinterpretar la falta de contacto como un: «no está por mí».
- Hay que ser tolerante a la frustración de no ver al otro, pensar en que es algo temporal y que después podréis seguir disfrutando el uno del otro.
Confinamiento conviviendo con tu pareja
Normalmente no pasamos tantas horas juntos y esto puede resultar agobiante si no se respetan una serie de medidas. Las que fomentan el tener espacios compartidos y espacios íntimos para cada uno. Pero lo bueno, es que las parejas sanas que están conviviendo juntas suelen tener más compromiso más afianzado que aquellas que están en fase de enamoramiento. Recordemos la teoría del amor, que se basa en tres elementos dispuestos en un triángulo:
- Pasión y atracción sexual (Eros),
- Amistad o intimidad (Philia)
- Compromiso/cuidado del otro/compasión (Ágape)
Para que una pareja esté afianzada deben de darse los tres elementos mínimamente a un cierto grado, aunque una pareja puede tener tendencias en dos elementos y esta tendencia puede ir variando a lo largo del tiempo.
Las parejas que conviven, entendemos que, si son parejas sanas sin conflictos fuertes, ya tienen los tres elementos más o menos en equilibrio, lo que provoca un amor profundo, que ya no es enamoramiento (ya que el enamoramiento sólo es Eros y Philia), el tercer elemento (Ágape) se adquiere una vez hemos visto lo que no nos gusta del otro, y decidimos seguir con esa persona a pesar de ello.
Partiendo de la base de que la pareja está sana, las recomendaciones son las siguientes:
- Que cada uno/a disponga de un espacio en casa para sí mismo/a.
- Pasar tiempo juntos y tiempo separados, respetar los momentos de soledad del otro, pero también compartir otros momentos juntos haciendo actividades de ocio.
- Tener sexo con cierta regularidad, en una pareja de larga duración, el Eros se puede ir apagando, así que conviene mantener ese fuego encendido.
- Repartirse las tareas de casa en un 50% si ambos trabajáis fuera de casa habitualmente. Los porcentajes de cantidad de tareas varían según la organización de la pareja. Hay parejas más tradicionales en las que uno se dedica exclusivamente a la casa y el otro trabaja fuera, si por ejemplo la persona que trabaja está en un ERTE y no tiene nada que hacer, conviene que ayude en casa. Hay que ser flexibles en los roles de cada uno.
- Seguir con las actividades que se tenían fuera de casa de forma online: ver a los amigos, hacer la clase de zumba, teletrabajo…. conviene intentar mantener esa rutina en la medida de lo posible.
- Dar por hecho que pueden aparecer más conflictos que puedan desestabilizar un poco la pareja, y ante esa situación, conviene tener momentos para conversaciones profunda sobre el bienestar de la pareja, sin que sean demasiado frecuentes tampoco.
Confinamiento conviviendo con tu pareja e hijos
El cuidado de los hijos es complejo, y una pareja puede no estar de acuerdo siempre en cómo poner límites o criarlos. Los hijos sin querer, pueden causar conflictos en la pareja. Pero no es que los causen ellos, sino en realidad, la falta de acuerdo y planificación en la pareja es lo que va a causar el conflicto.
Ante un conflicto de pareja por motivo de los hijos, alguno de los miembros de la pareja podría estar tentado a culpabilizar a los hijos de la reacción de un progenitor, esto es un error que conviene no hacer. El mal comportamiento en los hijos es causa de la falta de acuerdo y consistencia en la crianza de los padres.
La pareja debe tener conversaciones y acuerdos en privado sobre cómo establecer los límites a los niños. Recordar que los límites y la disciplina sin ser autoritarios en exceso, son elementos positivos para los niños, les dan rutina y estructura, y les enseñan los valores de la educación y el respeto.
Además de acordar cómo actuar, los padres debéis llevar a cabo los acuerdos hasta el final por mucho que os duela o os pongan ojitos vuestros hijos. Los niños deben aprender que su conducta tiene consecuencias.
El confinamiento puede desestabilizar el bienestar psicológico de los niños y esto puede hacer que se comporten peor de lo habitual, los niños necesitan estímulos externos, necesitan ejercicio físico para desahogarse, necesitan socializar… hay que aumentar un poquito la tolerancia al mal comportamiento, sabiendo esto, pero con los mismos límites de siempre. Contra más enérgico sea el niño más ejercicio físico con juegos en casa. También hay que enseñarles a autorregularse emocionalmente, es decir, deben aprender a relajarse y a jugar solos.
La pareja debe de encontrar momentos para sí misma, quizá en la noche, cuando ya lo niños duermen. Ver una serie juntos y abrazarse en el sofá puede ser un buen remedio contra el estrés.
Clínica Gouet te ofrece ayuda online para este tipo de problemas, si necesitas algo no dudes en llamarnos al 93 288 75 32 o escribirnos a contacto@clinicagouet.com.
Lic. Bárbara Amanda Pérez Gouet
Psicóloga General Sanitaria & Directora