Trastorno de Ansiedad Por Separación

El Trastorno de Ansiedad Por Separación se caracteriza por un miedo y ansiedad intensa delante de la separación de las figuras de apego. Es más común en etapas infantiles, pero también puede presentarse en la adolescencia y etapa adulta.

El Trastorno de Ansiedad Por Separación se encuentra dentro de la categoría de trastornos de ansiedad. Sabemos que en muchos casos, la ansiedad es una respuesta adaptativa, ya que nos ayuda a protegernos a la vez nos impulsa a realizar el esfuerzo para adaptarnos a nuestro entorno. Pero en ocasiones, cuando la ansiedad se apodera de nuestro presente, puede dar lugar a diversas patologías, las cuales se engloban en esta categoría de trastornos de ansiedad.

Definición del Trastorno de Ansiedad Por Separación

Los criterios que establece el Manual Diagnostico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-V) para este diagnostico son:

  • Miedo o ansiedad excesiva ante la separación de las personas con las que se siente apego. Esta ansiedad es inapropiada según el nivel de desarrollo que presenta el individuo. El miedo o la ansiedad se manifiestan, como mínimo en tres de las formas siguientes:
    • Malestar intenso y recurrente cuando la persona se separa de sus figuras de apego o de su hogar. También, aparecen estas emociones ante la anticipación de esta separación.
    • Preocupación constante y excesiva sobre la posible perdida de las figuras de apego. Siente preocupación porque estas figuras tengan un accidente, sufran alguna enfermedad, daño o muerte.
    • Preocupación constante y excesiva sobre la posibilidad de que ocurra un acontecimiento adverso que provoque la separación de las figuras de apego. Estas preocupaciones puede ser: ser raptado, perderse, ponerse enfermo, tener un accidente, etc.
    • Rechazo a salir lejos de casa, ir al colegio, ir al trabajo o a otro lugar, por miedo a la separación.
    • Miedo intenso y continuado cuando se esta sol@ en casa o en otros lugares. También se presenta resistencia a quedarse sol@ en cualquier lugar.
    • Rechazo y resistencia intensa a dormir fuera de casa o dormir lejos de las figuras de apego.
    • Pesadillas concurrentes con contenidos relacionados con la separación de estas figuras.
    • Cuando se prevé la separación, la persona manifiesta quejas de síntomas físicos como dolor de cabeza, dolor de estomago, vómitos, etc.
  • Este miedo, ansiedad y rechazo se mantiene en el tiempo y dura como mínimo 4 semanas (en niñ@s y adolescentes) y 6 semanas (en adult@s).

¿Cómo se vive con Trastorno de Ansiedad Por Separación?

Suele ser un trastorno frecuente en la infancia. Su prevalencia en la etapa adolescente y adulta disminuye considerablemente. Aun y así, es importante prestar atención a la dificultad de separación de personas con las que se establece un vinculo afectivo. Sobre todo si esta dificultad, interfieren de forma significativa en la cotidianeidad de la vida.

En la infancia suele experimentarse dificultad por separarse de los padres. En la etapa adulta, esta dificultad se puede dar al separarse de la pareja o de l@s hij@s.

El miedo de ser abandonad@, es en gran medida adaptativo, cuando aparece en la infancia (hasta los 2 años). Pero si este miedo persiste durante esta etapa, interfiriendo el desarrollo, significa que este miedo ha perdido su funcionalidad adaptativa. Lo mismo pasa, cuando se manifiesta en etapas posteriores, ya que este miedo se vuelve dependencia emocional. La persona siente que no puede vivir sin esta otra persona y separarse de ella, se vive como algo terrorífico.

La manifestación de esta dificultad se basa en una ansiedad muy intensa, por ello es frecuente que la persona experimente ataques de ansiedad cuando prevé o se da la separación de las figuras de apego. Las despedidas suelen ser momentos intensos emocionalmente, siendo dolorosos para ambas partes.

En la infancia, suele ser frecuente lloro desconsolado, suplica de no separación, pataleo, golpear o agarrarse fuerte a la persona de la que se tiene que separar. En este punto es muy importante, la actitud de la persona adulta, que deberá mantener la calma y no ceder ante estas demandas. Sino explicar el motivo por el que esta separación se tiene que producir, validando la emoción del niño o la niña y asegurando el momento en el que se volverán a encontrar.

Cuando se consigue esta separación, el o la infante suele preguntar recurrentemente donde esta el padre o la madre o ambos. Suelen presentar preocupaciones persistentes sobre perderlos y deseo constante de rencuentro.

En la etapa adulta, es frecuente que se presente una elevada preocupación por la pareja o l@s hij@s, que lleva a la persona a limitar su vida a actividades dentro del hogar y cerca de estas personas por las que se siente apegad@. El control de estas personas, suele ser un mecanismo que les ayuda sobrellevar su dificultad de separación. Este control es desmesurado y llega a niveles intrusistas, que provocan que la otra persona quiera alejarse más. Lo que hace que se entre en un circulo vicioso peligroso. Ya que este aumento en la separación, provocará una mayor ansiedad en la persona que padece de este trastorno.

Viven el momento de la separación como algo muy trise y angustiante. Cuando esta separación se da, el catastrofismo y la rumiación sobre el estado de la persona por la que se siente apego son continuados y persistentes. Muchas veces esta rumiación es insoportable, por ello les lleva a realizar conductas de control desmesuras.

Si la mayoría de estas características son predominantes en ti o algún familiar y sientes que recibir ayuda podría ser útil para conseguir un mayor bienestar, te ofrecemos consultarnos. Nuestro equipo estará encantado de acompañarte y ayudarte en aquello que desees y necesites.

Referencias

American Psychiatric Association & American Psychiatric Association. (2013). Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders DSM-5®. Madrid, España: Editorial Médica Panamericana.