Malestar emocional e inestabilidad políticosocial

Malestar emocional e inestabilidad políticosocial

Estamos viviendo unos meses en los que la inestabilidad política y social está generando un malestar emocional.

Quizá no nos interese la política, ni todo lo que está pasando alrededor nuestro, pero al final es imposible aislarnos de lo que está sucediendo en la sociedad.

Nos puede suceder que, ante tal bombardeo de noticias, empezamos a notar que estamos más nerviosos. Que nos cuesta dormir por las noches. Que estamos de peor humor o más susceptibles. Podría ser que nos sintiéramos agobiados. Esto podría ser a causa de que los hechos de actualidad nos están produciendo ansiedad, incluso, rabia o enfado.

Todo esto sucede porque estamos poniendo el foco de nuestra atención en el exterior

Hay actividades que van bien para el malestar emocional de este tipo de situaciones: el yoga, el mindfulness y la meditación.

Estamos más atentos de lo que sucede fuera que lo que nuestro cuerpo nos pide, y eso precisamente es lo que debemos hacer, escucharnos. Hay actividades que van bien hasta este tipo de situaciones. Tenemos, por ejemplo, gente que practica el yoga, el mindfullness, meditación, etc. Todas estas actividades tienen una característica en común que es poner la atención en nosotros mismos. Concentrarnos y durante el rato que realizamos la actividad nos aislamos del exterior. Ponemos atención plena en nuestras sensaciones.

Precisamente para superar todas estas situaciones de malestar que anteriormente hemos comentado debemos hacer eso mismo, centrarnos en el aquí y el ahora. En vez de centrarnos en las expectativas de futuro y la sensación de catastrofismo que la televisión puede hacernos sentir. Para conseguir esta concentración podemos acudir las actividades que anteriormente hemos descrito. También podemos realizar cosas como parar un momento al día y dedicarnos un rato a nosotros mismos. Dejar de banda la televisión, radio y móvil y estar unos minutos centrados en nosotros. Elaborar una serie de lista con las cosas que nos gustaría hacer y que podríamos hacer para mejorar nuestro contacto con nuestras verdades necesidades.

Hablamos de usar la atención o consciencia plena en nuestras actividades cotidianas, aprendiendo a realizarlas conectando con las sensaciones que generan: concentrarnos en las cosas que hacemos y aprender a disfrutar de ellas.

Si ponemos el foco en nosotros mismos un rato al día nos ayudará a despejar la mente y nuestra atención. “Resetear”, algo que a todos nos conviene en algún otro momento de nuestras vidas. Centrarnos, elaborar una serie de necesidades nuestras y con nuestra familia, realizar esas actividades, cultivar nuestros deseos, proyectos comunes con las personas con las que compartimos nuestro tiempo libre. Todo esto nos puede ayudar. También podemos centrarnos en actividades individuales como hacer ejercicio, leer libros, conocer gente nueva, etc., todo aquello que salga en nuestra lista y que sea factible y seamos capaces de realizar.

Si en algún momento del día nos sentimos agobiados por la situación deberíamos parar un momento, hacer algunas respiraciones profundas e intentar dejar la mente en blanco. Intentar centrarnos en los estímulos exteriores que nos rodean es clave, pero en aquellos que normalmente no vemos por estar demasiado distraídos por la interacción social (por ej. el viento que mece las hojas del árbol, la intensidad del sabor de la comida).

Es normal que nos interese la actualidad y así debe ser, pero en momentos de tanto caos, tantas noticias por todos lados, tanta información en televisión, radio y móvil, todo esto puede hacer que nos saturemos y nos haga crear malestar interior.

Tomarse un pequeño rato cada día para centrarnos en nosotros y aislar los pensamientos nos irá bien para reconducir y afrontar mejores las situaciones de los próximos días.