15 Métodos para controlar la ansiedad

Descubre 15 Métodos para controlar la ansiedad

En este artículo os brindamos diferentes maneras de manejar la angústia, pero es importante tener en cuenta que no todas sirven para todo el mundo, cada persona debe encontrar aquellas que le funcionan, y conviene hacerlo con la guía de un psicólogo especializado en ansiedad, ya que conviene evaluar de qué tipo de ansiedad se trata, puesto que en función del tipo de ansiedad algunas de estas técnicas no estarían recomendadas y otras sí.

Respiración diafragmática lenta

Respirar hinchando la barriga sin mover el pecho, muy lentamente. Que tu psicólogo o tu fisioterapeuta te enseñe. Hay otros tipos de respiración, conviene aprenderlos.

La Distracción

Con la ansiedad no puede usarse sólo la distracción, debe complementarse con la exposición a la ansiedad, pero no puedes estar todo el día centrado en tu ansiedad, tienes que descansar y distraerte en algunos momentos del día. Conviene focalizar la mente en estímulos exteriores y no estar dentro de tu cabeza todo el tiempo. Puedes jugar a videojuegos, juegos de mesa, estar con tus mascotas… pero nunca hasta el punto de que se convierta en una conducta evitativa (las conductas evitativas augmentan la ansiedad a largo plazo).

La exposición a la ansiedad

Escucha a tu cuerpo para cambiar tus emociones y supera tus propios pensamientos. Esta técnica se debe realizar con un psicólogo, mal hecha puede tener efectos no deseados.

La relajación progresiva muscular de Jacobson

Consiste en contraer y relajar grupos musculares o músculos por separado de tu cuerpo, por pasos y con mucha consciencia corporal.

Rituales de autocuidado no compulsivos

Hacer estiramientos, utilizar rituales con velas, olores que te traigan buenos recuerdos.

Autocuidados

Aunque no hay que realizar conductas extremas nunca cuando estamos ansiosos, tomarse un chocolatito caliente, un baño de burbujas, cuidarse la piel con crema, ir a un spa, tomarse una valeriana, son maneras de quererte a ti mismo que reducen el estrés y por tanto la ansiedad.

Las autoinstrucciones

Decirte a ti mismo que puedes aguantarla, que la ansiedad suele disminuir sola, mentalizarte con actitudes de empoderamiento y fuerza.

La meditación

Si lo intentas y te pones nervioso/a, quiere decir que esta técnica no es para ti. Pero si ves que puedes realizarla sin ponerte nervioso, conviene practicar 45 min. al día. Sin embargo, hay muchos tipos y conviene que tu psicólogo te enseñe a realizarla bien.

La imaginación positiva

Imagina algo que te haga sentir bien, déjate llevar por los detalles de tu fantasía y concéntrate todo lo que puedas en ella.

La música

Escuchar música modula tus emociones (para bien o para mal). Si estas triste y quieres sentirte mejor, ponte música alegre. Si quieres relajarte ponte más música tranquila o instrumental.

La medicación

Las benzodiazepinas pueden aliviar y controlar la ansiedad, pero son extremadamente adictivas, por lo que su control debe ser riguroso y habitual. El psiquiatra debería visitarte cada 2 semanas o mínimo 1 vez al mes. También hay antidepresivos que ayudan a controlar la ansiedad y las obsesiones, que no son adictivos y que te pueden ayudar durante un tiempo a recargar las pilas, el tiempo justo para re-equilibrar tu cerebro y aprender las técnicas conductuales de manejo de la ansiedad.

El yoga o los masajes son actividades que pueden ayudarte a mantener la ansiedad a raya.

No tomar ni alcohol ni cafeína ya que la cafeína activa el sistema nervioso simpático (que es el que te genera la ansiedad).

Llama a tu psicólogo/a para que te guíe

Ante un ataque de ansiedad o pide hora para que te enseñe las técnicas más específicas que uno solo no sabría hacer. El poder explicar a alguien externo tus preocupaciones, ansiedades, te ayudará no sólo a desahogarte, sino también a poner solución a aquellas cosas que te producen malestar emocional.

Queda con amigos de confianza o familiares

Con los que te sientas a gusto y sal a caminar, tomar un poco el sol, disfrutar de la naturaleza. Pídeles un abrazo o mimos si te sientes a gusto con el contacto físico; el amor, sea maternal o de pareja, calma la ansiedad y regula la afectividad positivamente.

 

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Lic. Bárbara Amanda Pérez Gouet

Directora de Clínica Gouet & Psicóloga General Sanitaria

Mejor psicóloga Barcelona